El vicepresidente del Banco Central (BCRA) anunció ante inversores que la entidad prevé comprar reservas a partir del 2026.
Ante inversores en Washington, Estados Unidos, el Banco Central (BCRA) dio algunas señales sobre su estrategia para los próximos años. Durante su presentación, el vicepresidente del organismos Vladimir Werning adelantó que en 2026 comenzará un proceso de “remonetización impulsada por la demanda”, que permitirá acumular reservas.
El diagnóstico fue presentado bajo el nombre “La Evolución del Régimen de Agregados Monetarios en Argentina”. Éste, parte de que la primera fase de estabilización, que en el año 2024 permitió “eliminar la dominancia fiscal y el exceso monetario heredado”.
La segunda, correspondiente a este año, busca “adaptar las metas monetarias para salir de la represión financiera (controles de divisas) y enfrentar los riesgo de evento (elecciones)“. Y la tercera, prevista para el año que viene, apunta a la “recuperación genuina de la demanda dinero”, que posibilitará recomponer las reservas internacionales.
El Banco Central prevé comprar reservas a partir de 2026: las tres etapas del proceso monetario
En la presentación, Werning repasó el esquema monetario vigente y su evolución hacia un nuevo régimen. Cuando habló de la estabilización, indicó que durante el 2024 se adoptó “un objetivo monetario para salir de un régimen de alta inflación”. Estuvo afectado por la dominancia fiscal y el “overhang monetario”. Lo calificó como un “trabajo pesado”, pero que quedó “efectivamente detrás” tras la reducción del déficit fiscal y la eliminación del sobrestock monetario.
Para este año, el plan contempla una “transición de régimen“. Implicó adaptar las metas monetarias para “abandonar la represión financiera” derivada de los controles cambiarios y “enfrentar los riesgos binarios” asociados a las elecciones. Según Werning, incluyeron “un shock electoral extraordinario, pero temporal, lo que deprimió la demanda de dinero”.
El documento que presentó el vicepresidente del BCRA ante inversores internacionales definió esa fase como período de “costos de crecimiento”. En él, “un ancla nominal basada en la cantidad de dinero requiere flexibilidad en el tipo de cambio y en las tasas de interés”.
La etapa de remonetización y la acumulación de reservas
Según anticipó, el eje de la estrategia para el año que viene radica en la fase de “remonetización impulsada por la demanda”. Planteó que “el margen para un crecimiento genuino de la demanda de dinero es amplio y podrá satisfacerse con fuentes internas o externas de financiamiento”.
Asimismo, el texto explica que “la compra de reservas no esterilizadas ofrecerá un mecanismo con alto potencial en la Argentina”. El planteo es que la del próximo año será una fase en la que proyecta volver a comprar divisas y fortalecer sus reservas internacionales.
El objetivo será “gestionar el objetivo monetario para satisfacer una recuperación genuina de la demanda de dinero y la acumulación de reservas”, detalló. Ese marco, de acuerdo a la presentación, contribuirá a “anclar las expectativas de inflación, facilitar la normalización de precios relativos y promover el crédito y la actividad económica”.
Finalmente, concluyó que “la remonetización impulsada por la demanda en 2026 y en adelante será conducente a la acumulación de reservas“.
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