Con el cambio climático, es frecuente que enlos días fríos se presenten diversas afecciones respiratorias. Una receta casera de té de jengibre para combatir el dolor de garganta y la congestión.
El jengibre es una raíz aromática originaria de Asia de sabor picante, famosa tanto por su uso culinario como por sus propiedades medicinales. A continuación, sus beneficios para la salud y una receta de té que podés preparar en casa.
Despeja las vías respiratorias
Sus propiedades expectorantes y descongestionantes ayudan a aflojar y eliminar la mucosidad, facilitando la respiración y aliviando la sensación de opresión en el pecho. Esto lo convierte en un recurso valioso para afrontar afecciones como el resfriado común, la gripe, la bronquitis y otras enfermedades respiratorias. Además, sus compuestos bioactivos, como los gingeroles y shogaoles, tienen propiedades antiinflamatorias.
Fortalece el sistema inmunológico
Los compuestos antioxidantes del jengibre ayudan a proteger las células y a neutralizar los radicales libres, lo que puede reducir el riesgo de infecciones y contribuir a una respuesta inmunológica eficaz.
Reduce la tos e irritación
Beber té de jengibre caliente o consumir jengibre en otras formas puede ayudar a suavizar la garganta y reducir la necesidad de toser.
Receta de té de jengibre
- En una cacerola, colocar el jengibre con el agua.
- Colocar la mezcla a fuego alto y llevarlo a ebullición.
- Luego cocinar a fuego lento durante 5-10 minutos.
- Verter el té a través de un colador fino para atrapar todo el jengibre.
- En este momento se puede agregar limón o miel para mejorar el sabor. Algunos incluso añaden menta.
El secreto del té de jengibre perfecto es hervir la planta a fuego lento durante mucho tiempo para resaltar el sabor.
Además, podés sumarle unas rodajas al agua para el mate, o incorporarlo en las comidas. También es posible optar por suplementos de jengibre en forma de cápsulas o extractos, bajo la guía de un profesional de la salud.
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