Según el INDEC el actual nivel de pobreza ubica a la Argentina en situación comparable a Bolivia

El INDEC ha publicado las estimaciones de pobreza e indigencia correspondientes al segundo semestre de 2022. El nivel de pobreza en Argentina se situó en el 39,2%, lo que representa un incremento respecto al semestre anterior del 36,5%, y se acerca al 42% en el que había terminado 2020.

Pobreza en Argentina

La pobreza afecta a más de 18 millones de personas. En cuanto a la indigencia, se situó en el 8,1%.

La incidencia de la pobreza aumentó en todas las regiones, mientras que la indigencia disminuyó en dos regiones y aumentó en las otras cuatro.

La pobreza en Argentina es un problema que se ha mantenido durante décadas. A partir de 2003, la incidencia de la pobreza comenzó a caer sostenidamente hasta llegar al 25,5% a fines de 2006. Sin embargo, tras la pandemia de COVID-19, la pobreza ha aumentado en el país, y la elevada inflación registrada en 2022 ha agravado la situación.

La pobreza en Argentina se ubica en situación comparable a Bolivia (37,2%).

El índice de pobreza varía por región:

Las provincias del Noroeste y del Noreste encabezando la tabla del índice de pobreza con porcentajes del 43,6% y 43,1% respectivamente.

En orden decreciente se ubicaron las provincias de la región Cuyo, con el 39,6%; el Área Metropolitana Buenos Aires, con el 39,5%; la zona Pampeana, con el 36,3%; y la Patagonia, con el 34,7%. También se observó un aumento de la pobreza de 2,2 y 4,7 puntos porcentuales respectivamente en los aglomerados de 500.000 y más habitantes y en los de menos de 500.000 con respecto al primer semestre de 2022.

En cuanto a ciudades, el mayor porcentaje de índice de pobreza se registró en Concordia, Entre Rios, con el 55,2%, seguido por Resistencia, Chaco, con el 54%, Santiago del Estero, con el 46,5%, San Luis y Corriente, ambas con el 45,2%.

Pobreza e indigencia por regiones estadísticas y 31 aglomerados urbanos, en porcentajes.
Segundo semestre de 2022

Los analistas anticipaban que el índice de pobreza en Argentina rondará el 40% en el segundo semestre de 2022, un salto que se explicaba por la escalada de la inflación, que cerró el año pasado con un alza del 94,8%. Sin embargo, este dato es considerado “viejo”, ya que con la inflación de marzo 7,7% y un aumento de la canasta básica total -el umbral de la pobreza- de 8,3% y de la canasta alimenticia, que mide la indigencia, del 11,7% en ese mes, la pobreza en Argentina ya ronda el 42%. El aumento de las canastas estará por encima de la inflación y no podrá compensar la caída de los ingresos reales con más empleo.

Con la finalidad de superar la pobreza en Argentina, es fundamental generar empleo en cantidad y calidad adecuadas. La mayor parte de los recursos destinados a satisfacer las necesidades básicas proviene de los ingresos laborales. Sin embargo, la elevada proporción del empleo informal en el país (más del 30%) indica que una elevada fracción de la fuerza de trabajo no cuenta con sistemas adecuados de protección social en materia de salud, seguros de desempleo y acceso a sistemas jubilatorios y de pensiones que aseguren niveles de bienestar justos para la población adulta mayor. Además, el empleo en un puesto de trabajo no registrado conlleva una importante desventaja salarial.

Indigencia en Argentina

Para disminuir la tasa de pobreza en Argentina, es importante llevar a cabo políticas públicas que fomenten la creación de empleo, especialmente en las regiones más afectadas por la pobreza. Además, es necesario mejorar la calidad del empleo y reducir la informalidad. Asimismo, es fundamental fortalecer los sistemas de protección social para garantizar que los sectores más vulnerables tengan acceso a servicios de salud, seguros de desempleo y sistemas jubilatorios y de pensiones.

En cuanto a la indigencia, esta variable está fuertemente ligada a la capacidad adquisitiva de los planes y subsidios sociales que explican buena parte de las fluctuaciones en los ingresos de los sectores ubicados en los estratos más bajos de la pirámide social. Por lo tanto, es importante que el Estado continúe brindando apoyo a los sectores más vulnerables para garantizar que tengan acceso a los recursos necesarios para satisfacer sus necesidades básicas

Con respecto a las políticas oficiales, el investigador de CEDLAS, Leopoldo Tornaroli, menciona que con estos niveles de inflación, pierden eficacia. La pobreza y la indigencia son menores con la Asignación Universal por Hijo (AUH) que lo que serían si la asignación no estuviera, pero posiblemente pierdan con la inflación y su rol como política de mitigación de la pobreza pierda efectividad.

RLC Noticias de Rosario la ciudad

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