Así era conocido el sicario de la banda liderada por Julio Rodríguez Granthon.
Se trata de Marcos Nicolas Delapuente de 27 años, quien según las investigaciones llevadas adelante por los fiscales de la Unidad de Balaceras, seria quien ejecutaba las ordenes desde la prisión federal que emitía Granthon.
El juez Nicolas Foppiani le dictó la prisión preventiva efectiva por el plazo de ley.
Delapuente, junto a Nazareno Uriel “Anteojitos” Gauna (también detenido) era quien estaba encargado de las balaceras y extorsiones. Este último había sido imputado por asociación ilícita el año pasado, cuando cayeron otros 19 miembros de la banda que acechaban Funes, Roldan, Rosario y Arroyo Seco
También en las escuchas trascendió acusaron que mediante una empresa de transportes, realizaban el blanqueo de capital que provenia de la venta de estupefacientes.
A partir de sus actividades vinculadas al narcotráfico y al narcomenudeo, esta organización criminal realizó un despliegue de actos de violencia en la ciudad de Rosario, particularmente en algunos barrios de la Zona Oeste y Norte de Rosario, alguno de los cuales aún no han sido identificados. Todo ello con la finalidad no solo de apropiarse del territorio para el desarrollo de sus actividades ilícitas y excluir de allí a la competencia, sino de doblegar la voluntad de las personas que mantenían deudas con la asociación criminal para obligarlas al pago, con la intención de sembrar temor no solo en estas últimas sino en todos los miembros de la sociedad.
Asimismo, este grupo de personas, además de las zonas Oeste, Norte y Sur de la ciudad de Rosario, desplegó su actividad criminal en las localidades aledañas de Arroyo Seco y Funes.
La organización criminal descripta funcionó desde momentos indeterminados, al menos desde el mes de enero de 2022, hasta el 12 de diciembre de 2022, fecha en que se produjo la detención de varios de los integrantes que se encontraban en libertad.
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