Los contratos que se firmen a partir del 1 de mayo o deban actualizar su precio interanual, deberán hacerse con aumentos del 95,43 por ciento.
Este aumento se debe a que los alquileres están casi atados a la inflación, y el método de ajuste se apoya en el Índice de Contratos de Locación (ICL) que regula el Banco Central y las previsiones respecto de los datos en los que éste se basa son inflación y remuneración promedio. Los analistas estiman que muy pronto de no resolverse otra acción se llegará a un aumento del 100% o más.
Desde el sector inmobiliario siguen sosteniendo que lo ideal sería volver a contratos a dos años y ajustes semestrales, mientras que agrupaciones de inquilinos rechazan la opción y defienden los acuerdos a tres años.
El propietario hoy ve que mientras la inflación escaló al 104,3% anual, siguió cobrando todos los meses sin ningún cambio, ni un peso más, los mismos monto por el que alquiló a una persona en abril de 2022. Ahora con el ajuste anual, desde el 4/2023 comenzó a cobrar $109.441, un aumento de casi el 93%, mientras hoy un departamento similar se alquila en el mismo barrio hasta por casi 20% más.
En cuanto a los inquilinos, el aumento repentino de los alquileres puede ser un golpe fuerte para ellos, ya que de repente venían pagando una cifra y pasan a abonar casi el doble por mes, cuando en la mayoría de los casos los salarios no llegaron a ajustarse al mismo monto que el alquiler. Es un cambio significativo además de todos los aumentos para afrontar los gastos cotidianos que se están registrando por la inflación.
Existen varias webs que brindan detalles de cómo estipular los aumentos en los acuerdos que se firman. Una de ellas es la del Instituto de Vivienda de la Ciudad de Buenos Aires (IVC). La ley sancionada en julio de 2020 tiene un esquema en la que se puede determinar el precio de los contratos. Para precisarlo, es aconsejable ingresar al sitio oficial (https://vivienda.buenosaires.gob.ar/calculadora_alquiler#top). Allí hay una calculadora para poder conocer el aumento de las locaciones residenciales. En primer lugar, se debe colocar la fecha en la que se firmó el contrato, para saber cuál era el índice en ese momento; luego se debe seleccionar la fecha de actualización del contrato, y después el usuario debe indicar el monto inicial del contrato sin puntos para separar las decenas de mil.
En cuanto a los aumentos en los alquileres, siempre hay dudas, sobre todo de propietarios e inquilinos, en cómo calcular y aplicar los aumentos en los acuerdos que se firman. Desde el segmento inmobiliario se argumenta que hay que ubicarse en dos lugares distintos: del lado del propietario y del inquilino.
Las propuestas para que la nueva ley haga crecer la oferta de viviendas son variadas, algunas de las mencionadas son: incentivar la construcción de viviendas de interés social, fomentar la oferta de inmuebles vacíos, otorgar beneficios fiscales a los propietarios que ofrezcan alquileres a precios accesibles, promover el desarrollo de nuevas alternativas habitacionales y generar un “fondo de garantía” para los inquilinos.
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