Secuestraron, abusaron y luego asesinaron a Rocío Gómez en 2011. A casi quince años del hecho, la justicia condenó a Hernán Lazo por homicidio.
El fallo cierra un capítulo doloroso para la familia de la víctima, aunque la justicia aún sigue su curso en otros aspectos del caso. En la tarde de este lunes, dieron a conocer el veredicto sobre el femicidio de Rocío Gómez, una joven de 17 años que asesinaron brutalmente en 2011 en la zona norte de Rosario.
El Tribunal Pluripersonal de Rosario, integrado por los jueces Ismael Manfrin, Fernando Sosa y Silvana Lamas González, condenaron a Hernán Lazo a 20 años de prisión por los delitos de homicidio simple y robo calificado, todos en concurso real, como coautor del crimen.
Rocío Gómez fue secuestrada junto a su hijo de un año y cuatro meses en el mes de febrero de 2011. La joven fue privada de su libertad en el domicilio de los hermanos Lazo, ubicado en Valle Hermoso al 1200, en Barrio La Cerámica.
En ese contexto, Hernán Lazo, su hermano Juan José Lazo (ya condenado) y otros cómplices la sometieron a golpes, abuso y finalmente la asesinaron. Abandonaron a su hijo en un descampado en San Nicolás, donde lo encontraron en mayo de 2011, meses después del secuestro.
El fiscal Alejandro Ferlazo, quien estuvo a cargo de la investigación, describió la brutalidad del hecho. En el juicio detallaron cómo los secuestradores, entre ellos Hernán Lazo, retuvieron a Rocío y su hijo en ese inmueble mientras cometían una serie de delitos. Hallaron el cuerpo de Rocío en un predio en Martín Fierro al 600, en Rosario, en agosto de 2011. Afortunadamente, encontraron al hijo de la víctima con vida.
Iniciaron el caso bajo el antiguo sistema procesal penal, lo que generó algunas dificultades en la calificación legal del crimen, ya que incorporaron la figura de “femicidio” al Código Penal en 2012, un año después del crimen.
La condena
La condena a Hernán Lazo llega después de años de fuga. Lo detuvieron en 2021 en la localidad de Trenque Lauquen, después de haber estado prófugo por más de 10 años. La fiscalía solicitó una sentencia de 20 años, aunque la querella pidió prisión perpetua. Esto no fue posible debido a las limitaciones legales del caso.
Este juicio cierra una etapa en la lucha por justicia para Rocío Gómez y su familia. La condena a Hernán Lazo es un paso significativo, aunque aún persisten aspectos legales por resolver, como las penas de otros involucrados en el crimen. La historia de Rocío, marcada por la violencia y el sufrimiento, sigue siendo un recordatorio de la necesidad de continuar luchando contra la violencia de género en todas sus formas. La condena es, sin duda, un triunfo en la búsqueda de justicia, pero la familia de Rocío sigue esperando que el caso se cierre definitivamente con la plena aplicación de la ley.
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