El Consejo Constitucional de Francia ha aprobado la reforma de las pensiones impulsada por el presidente Emmanuel Macron, la cual retrasa la edad de jubilación de los 62 a los 64 años.
La medida ha sido objeto de controversia en Francia, y ha sido rechazada constantemente por sindicatos y una mayoría de franceses, según sondeos. La decisión del Consejo Constitucional ha sido recibida con abucheos y manifestaciones en París. A pesar de que el Consejo Constitucional invalidó seis artículos de la ley, incluyendo los relativos al fomento de la contratación de trabajadores mayores de 55 años en las grandes empresas, la validación de los puntos clave de la ley reconforta al gobierno.
La medida de retrasar la edad de jubilación a los 64 años para 2030 y exigir un mínimo de 43 años de trabajo para recibir una pensión completa es parte de una reforma más amplia del sistema de pensiones francés. El objetivo de la reforma es reducir los costos del sistema de pensiones, que se espera que aumenten debido al envejecimiento de la población y la disminución del número de trabajadores.
A pesar de que la medida ha sido criticada por sindicatos y una mayoría de franceses, algunos expertos en pensiones argumentan que la reforma es necesaria para garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones francés a largo plazo. Además, la medida de exigir un mínimo de 43 años de trabajo para recibir una pensión completa se ha justificado con el argumento de que las personas viven más tiempo y, por lo tanto, necesitan trabajar más años para financiar sus pensiones.
Algunos sindicatos y políticos de izquierda han argumentado que la reforma es injusta para los trabajadores más jóvenes y aquellos en trabajos precarios, quienes tendrán que trabajar más años para recibir una pensión completa. También se ha argumentado que la medida es innecesaria, ya que el sistema de pensiones francés ya está entre los más sostenibles de Europa.
En cuanto a las posibles soluciones alternativas, algunos expertos han sugerido que se podrían aumentar las contribuciones de los empleadores y los trabajadores al sistema de pensiones para financiarlo de manera más sostenible, en lugar de aumentar la edad de jubilación o exigir más años de trabajo. Otros han sugerido que se podrían introducir reformas para fomentar la contratación de trabajadores mayores, en lugar de restringirla.
Comentarios