El cantante se presentó en su tierra natal por segunda noche consecutiva en la capital y, mientras interpretaba “La Incondicional”, no pudo evitar emocionarse.
Luis Miguel se encuentra tocando en tierras mexicanas en el marco de su exitosa y extensa gira “Luis Miguel 2023”. Lleva ya tres shows en ese país y le esperan varios más hasta mediados de diciembre. Sin embargo, en el concierto de este miércoles en Ciudad de México, el cantante hizo un quiebre.
Después de una primera velada en el Arena Ciudad de México, envuelta en una polémica por presuntamente haber besado en la boca a una niña del público, el vocalista salió al escenario por segunda noche consecutiva.
Cuando el artista encaraba la última parte del recital, y al momento de interpretar su hit “La Incondicional”, el público comenzó a corear la canción al unísono, algo que dejó impactado al cantante.
Es allí cuando “el Sol de México” dirigió el micrófono hacia la audiencia para que la gente sea la que cante, mientras él no podía ocultar su emoción y comenzó a llorar. Posiblemente las polémicas que le atribuyeron o el cansancio de la gira hicieron mella en Luis Miguel, que se mostró más sensible de lo habitual.
Claramente esta situación hizo que justo con “La Incondicional” el mexicano le agradeciera el apoyo a su público pese a todo.
Una gira extenuante
Algunas semanas atrás, el vocalista fue noticia por un supuesto problema físico durante uno de sus conciertos en New York. La semana pasada, accidentalmente golpeó a un guardia de seguridad con una enorme pelota inflable y, el martes, todo tipo de críticas cayeron sobre él por un simple beso a una niña del público.
Si bien esta clase de figuras públicas y con tanta trayectoria suelen estar acostumbradas a la exposición y el amarillismo, no dejan de ser seres humanos. Y Luis Miguel lo demostró anoche.
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