Alfredo Casero fue intervenido el pasado lunes por un problema en su pierna y cadera y desde entonces la información sobre su salud fue confusa.
Después de la operación a la que fue sometido Alfredo Casero el lunes pasado, la información sobre su evolución fue un tanto confusa. Desde el círculo íntimo optaron por no hablar del tema y en los últimos días no había forma de saber cómo se encontraba el actor y humorista.
El lunes por la madrugada Alfredo Casero ingresó a la clínica San Camilo de Buenos Aires por fuertes dolores en su cadera que afectaban su movilidad. Incluso se habló de que una de sus piernas también estaba comprometida.
Por la mañana del 17 de marzo fue intervenido quirúrgicamente y se conoció que le realizaron un reemplazo de cadera y le colocaron una prótesis. El comediante venía con este problema físico desde hace varios meses.
La obesidad que sufrió durante décadas, llevaron a este deterioro que requirió una operación que el propio artista venía posponiendo. De hecho, Casero ya estuvo internado dos veces por este tema y en ambas oportunidades desoyó las recomendaciones médicas y enseguida volvió a trabajar en teatro.
“Paciente cursando tercer día de posoperatorio de cirugía programada de reemplazo total de cadera por artrosis. Presenta una evolución acorde al tiempo de la cirugía. Se encuentra estable, de buen ánimo. Comenzó rehabilitación kinesiológica. Continúa en internación en sala general”, informó el parte médico de la clínica este miércoles.
De acuerdo a lo que trascendió, el actor realizó la última función de “Cha Cha Cha” en silla de ruedas debido a sus dificultades. Tras algunos días de misterio, finalmente se supo que Alfredo está en plena recuperación.
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