Un estudio realizado por el Conicet reveló que los mosquitos portadores del virus del dengue son capaces de sobrevivir a los productos utilizados en las fumigaciones.
Esta preocupante situación se presentó con la llegada inminente de la primavera y el aumento de las temperaturas.
El estudio, llevado a cabo por investigadores del Conicet, identificó la presencia de mosquitos transmisores del dengue que muestran una notable resistencia a los insecticidas. Inicialmente, se realizaron investigaciones en varios barrios de Posadas, Misiones, donde la población de mosquitos es especialmente alta.
Sin embargo, también se confirmó la existencia de mosquitos con esta mayor resistencia en áreas del Gran Buenos Aires, como Lomas de Zamora, Quilmes y Avellaneda, entre otros.
Según estas investigaciones, se comprobó la presencia de mutaciones genéticas en el mosquito Aedes aegypti, el principal portador del virus del dengue. Estas mutaciones les otorgan resistencia a los insecticidas utilizados en las fumigaciones, lo que los hace tolerantes a dosis que normalmente serían letales.
Ante esta situación, los científicos se encuentran trabajando en el desarrollo de estrategias alternativas para el control de estos mosquitos resistentes, así como en medidas preventivas para evitar la propagación del dengue durante el verano.
La vacuna está, pero aún no se aplica
Al mismo tiempo, existe expectativa en torno a la vacuna contra la enfermedad, la cual fue aprobada en abril por la ANMAT, pero aún no comenzó a ser administrada en Argentina. Se espera que las dosis estén disponibles a partir de esta primavera.
El laboratorio japonés Takeda estuvo trabajando en el proceso de producción durante meses y está haciendo esfuerzos para acelerar los tiempos de fabricación y distribución.
Aún no se determinó qué sector de la población tendrá prioridad para recibir la vacuna ni cuándo los centros de vacunación privados podrán suministrarla.
Según los ensayos clínicos que evaluaron su eficacia y seguridad, las dosis pueden ser administradas a personas a partir de los 4 años, tanto con como sin antecedentes de dengue, sin necesidad de realizar un análisis de sangre previo para confirmar la infección.