El Párroco de la iglesia protestante de Saint-Guillaume en Estrasburgo, Francia, recibió amenazas de muerte por parte de opositores al espectáculo que combinaba canto lírico y pole dance, el cual se llevó a cabo en su templo.
Daniel Boessenbacher, de 54 años, decidió alquilar la iglesia para que la asociación Crossed Passions realizara dos shows que incluían el polémico baile del caño, el cual recibió críticas de algunos miembros de la comunidad religiosa. Algunos de ellos incluso enviaron cartas amenazantes al Párroco, pidiendo la decapitación de los feligreses y la cabeza del sacerdote.
Boessenbacher afirmó que las amenazas fueron una respuesta desproporcionada a un espectáculo que considera “seductor, pero suave”. Además, lamentó que algunas personas no apreciaran la exhibición y criticó a aquellos que tildaron la iglesia de “cabaret”.
El Párroco ha sido objeto de críticas previas por organizar eventos sobre temas controversiales como la transidentidad y la intersexualidad, pero asegura que nunca antes había recibido amenazas de muerte. A pesar de ello, el sacerdote ha afirmado que seguirá abriendo las puertas de su iglesia a eventos que promuevan la diversidad y la inclusión.
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