Durante la mañana del miércoles buzos comenzaron a trabajar alrededor de los restos del puente derribado. Seis trabajadores desaparecidos son el foco de esta búsqueda.
El accidente en el puente de Baltimore desencadenó una serie de eventos desafortunados. Por un lado, el cierre indefinido del puerto, uno de los más activos en la costa este de Estados Unidos, y por el otro un caos de tráfico que se ha extendido por la ciudad y sus alrededores.
Las esperanzas de encontrar sobrevivientes disminuyeron rápidamente, lo que llevó a la suspensión de la búsqueda el martes por la noche. Después de 18 horas de esfuerzos intensivos desde que los buzos se sumergieron en las gélidas aguas, las condiciones peligrosas hicieron que la operación nocturna fuera impracticable.
El coronel de la policía estatal Roland Butler expresó a la prensa la determinación de reanudar la búsqueda a las 6 de la mañana del miércoles, declarando: “Esperamos lanzar buzos al agua y llevar a cabo una búsqueda más detallada para recuperar a los seis desaparecidos”. Sin embargo, las esperanzas de encontrar a los trabajadores con vida son pocas. Según el contralmirante de la Guardia Costera Shannon Gilreath, “no creemos que vayamos a encontrar a ninguna de estas personas con vida”.
Sobre el accidente
La tragedia ocurrió cuando el buque portacontenedores Dali, con bandera de Singapur, chocó contra un pilar de apoyo del puente alrededor de la 1:30 a.m. Esto provocó el colapso de una sección del puente, arrojando vehículos y trabajadores al río Patapsco.
Aunque las autoridades lograron detener el tráfico en el puente antes del impacto, evitando así una mayor pérdida de vidas, queda la incertidumbre sobre si se pudo alertar al equipo de trabajo. Por su parte, el gobernador de Maryland Wes Moore aseguró a la prensa que el puente cumplía con las normativas y no había problemas estructurales conocidos.
Asimismo, la tragedia ha tenido un impacto significativo en las cadenas de suministro, según el secretario de Transporte de Estados Unidos, Pete Buttigieg. El cierre del puerto de Baltimore podría tener repercusiones en la economía a largo plazo, aunque algunos expertos dudan que cause una crisis de la cadena de suministro.
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