Liam Payne, excantante de One Direction, murió este miércoles en Argentina. Dejó una fortuna que se espera que beneficie mayormente a su hijo Bear de 7 años.
En los últimos días, el mundo del espectáculo se vio sacudido por el trágico fallecimiento de Liam Payne, el joven británico, exintegrante de One Direction que murió tras al caer de un balcón en el hotel que se hospedaba en Argentina.
El 16 de octubre, Payne falleció tras caer del balcón de un hotel en Palermo, donde se encontraba alojado. A pesar de los esfuerzos del personal médico, el artista no pudo ser salvado, tras las graves lesiones que sufrió.
Según lo trascendido, Liam dejó una impresionante fortuna, estimada en unos USD 70 millones. La mayor parte de ese patrimonio fue resultado de su exitosa carrera musical, siendo parte de One Direction como así también en su etapa como solista.
Payne se hizo famoso en el año 2010, junto a Harry Styles, Zayn Malik, Louis Tomlinson y Niall Horan en el programa de talentos The X Factor UK.
La banda estuvo activa hasta que anunciaron su pausa en 2015, momento en el que el joven comenzó a explorar su carrera solista.
La herencia
Se espera que la mayor parte de su fortuna pase a su único hijo, Bear Gray Payne, fruto de su relación con la cantante y exjurado de X Factor, Cheryl Cole.
Bear nació en 2017, y según declaraciones de Liam en nota con un medio, su deseo era que todo su patrimonio pasara a manos de su hijo. “Mi vida ahora es suya, mi dinero es suyo”, mencionó el artista.
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