Newell’s es el segundo equipo con menos efectividad de la Liga Profesional y la falta de gol a esta altura es preocupante.
Es evidente que los problemas de este Newell’s son más de uno. El año no ha sido nada bueno y si bien con la llegada de Ricardo Lunari algunas cosas cambiaron, lo cierto es que el equipo no tiene un buen funcionamiento. En este sentido, uno de los puntos más sensibles es la falta de gol.
La Lepra es el segundo equipo con peor efectividad frente a la arco de la Liga Profesional. Se ubica únicamente arriba de Barracas Central. Los delanteros no han estado finos y el doble nueve de poco sirvió. Muchos puntos quedaron en el camino por este motivo y por eso el presente no es del todo bueno.
Aunque lo cierto es que desde que el entrenador actual llegó al banco de suplentes, Newell’s recuperó gol. De hecho, frente a Tigre, el primer partido de Lunari al frente del equipo, cortó una racha de seis partidos sin convertir. Y anotó seis en apenas tres partidos: 1-0 al Matador, 3-3 a Riestra y 2-1 a Lanús. Pero frente a Godoy Cruz el último fin de semana cayó en el mismo vicio.
La falta de gol en Newell’s es preocupante: solo supera a Barracas Central
El porcentaje de eficacia es del 5,6%. Convirtió 12 goles en 213 intentos. Mientras que el promedio de Barracas Central es de 4,3% (8 goles en 185 remates). Arriba de la Lepra se ubican Independiente Rivadavia (10 en 167) y Argentinos Juniors (14 en 235), ambos con una eficacia del 6%. Vélez es el equipo con mejor número, con 14%: 14 goles en 222 remates.
La mala racha de los nueves
Por supuesto que los apuntados como responsables -en parte- son Juan Ignacio Ramírez y Juan Manuel García. Ambos fueron titulares en todos los partidos del ciclo actual. También es cierto que al equipo le cuesta mucho generar y no son demasiadas las chances claras que les quedan a los atacantes.
Juanchón García es más participativo en lo que respecta a la parte ofensiva, pero en la Liga Profesional todavía no convirtió. El Colo, por su parte, anotó dos, uno de ellos de penal.
Pero jugar con dos centrodelanteros no convence ni al cuerpo técnico ni a los hinchas y tampoco ha resultado favorable para el equipo. Según el técnico, los mantuvo por necesidad y no por preferencia. Aunque reconoció que el sistema táctico no será siempre este.
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