El gobierno argentino está enfrentando una complicada situación económica mientras negocia con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Según los últimos datos, la emisión de Adelantos Transitorios (AT) del Banco Central para financiar al Tesoro ya alcanzó los $670.000 millones hasta el 11 de mayo, lo que equivale a más del 12% de la base monetaria. Este nivel de endeudamiento supone el incumplimiento de una de las metas acordadas con el FMI en 2021, precisamente en medio de las negociaciones con el organismo internacional.
Así lo señaló la Fundación Libertad y Progreso (LyP) en un informe en el que destacó que «el gobierno está incumpliendo la meta pautada con el FMI no solo del segundo trimestre, la cual establece un máximo de $372.800 millones para la emisión de Adelantos Transitorios hasta el 30 de junio de 2023, sino también la del tercer trimestre establecida en $651.400 millones».
El acuerdo establecía que el financiamiento monetario neto del BCRA al Tesoro no podía superar los $100.000 millones en todo el año, pero en los primeros cinco meses de 2023, el monto ya se multiplicó por seis. Expertos en economía y analistas financieros señalan que este endeudamiento es insostenible en el largo plazo y puede generar presiones inflacionarias y cambiarias, además de afectar la credibilidad del gobierno y la confianza de los inversores.
El incumplimiento de las metas acordadas con el FMI es una de las principales preocupaciones en las negociaciones en curso. Además, puede poner en riesgo otras condiciones del acuerdo, como el control de la inflación y la estabilidad cambiaria. Por tanto, es necesario buscar alternativas de financiamiento y reducir el déficit fiscal para cumplir con las metas acordadas y evitar mayores problemas en el futuro.
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