La caída de junio en el consumo de servicios esenciales refleja el impacto de la recesión y de los feriados largos en la actividad económica. La baja es la más profunda desde el inicio de la pandemia.
En junio, el consumo de electricidad, gas y agua se desplomó un 11,1% en comparación con mayo, alcanzando el nivel más bajo desde abril de 2020, en pleno confinamiento por la pandemia de Covid-19. El retroceso, el más pronunciado en más de tres años, refleja el impacto de la recesión que atraviesa el país, agravada por menos días hábiles debido a los feriados largos.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó este martes que el Indicador Sintético de Servicios Públicos (ISSP) mostró una caída del 2,9% mensual en junio, y un descenso interanual del 4,2%. El principal factor detrás de esta baja fue el desplome en el consumo de electricidad, gas y agua, una de las divisiones de mayor incidencia en el indicador.
Recesión y tarifas
El contexto económico es clave para entender esta caída. En junio, la actividad industrial también mostró una de sus peores contracciones desde la pandemia, lo que se sumó a la recesión generalizada y al impacto de los aumentos tarifarios, que frenaron aún más el consumo energético. Menos días laborales debido a los feriados largos también contribuyeron a reducir la demanda de estos servicios esenciales.
Además del fuerte retroceso en energía, otros sectores también mostraron caídas en junio: los servicios de correo bajaron un 13,3% y el pago de peajes retrocedió un 0,6%. Por otro lado, la telefonía, que tiene el mayor peso en el índice general, no mostró cambios significativos respecto de mayo.
Sin embargo, hubo algunos sectores que registraron mejoras. El transporte de pasajeros creció un 1,4%, impulsado principalmente por los colectivos urbanos, mientras que la recolección de residuos aumentó un 1%, y el transporte de carga se mantuvo casi estable con un leve crecimiento del 0,1%.
¿Cómo se mide la demanda?
El INDEC mide la demanda de electricidad, gas y agua a través del ISSP. La demanda de electricidad se refiere al consumo del Sistema Interconectado Nacional y al autoconsumo de energía autogenerada y cogenerada, expresado en gigavatios hora (GWh).
En cuanto al gas natural, se mide el consumo total entregado al mercado interno, excluyendo pérdidas y consumos en los procesos industriales, y se expresa en miles de metros cúbicos (m3). Finalmente, el agua entregada a la red corresponde al caudal total producido por AYSA, incluida en la medición en metros cúbicos (m3).
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