Tras derrotar a Kamala Harris, el republicano Donald Trump será el 47° presidente de Estados Unidos.
En una sorprendente vuelta a la política estadounidense, Donald Trump fue declarado el nuevo presidente de Estados Unidos, asumiendo el cargo como el 47º presidente del país.
Este regreso marca un hito significativo, ya que Trump previamente ocupó la presidencia del 2017 al 2021. Su victoria se consolidó tras un desempeño sólido en estados claves como Carolina del Norte, Pensilvania, Wisconsin y Georgia, donde logró captar el apoyo de un electorado que busca un cambio en la dirección del país.
En su discurso de aceptación, Trump proclamó una “magnífica victoria” y se comprometió a llevar a Estados Unidos hacia lo que él describe como una “época dorada”. Este mensaje resuena con muchos de sus seguidores, quienes ven en su liderazgo una oportunidad para revitalizar la economía y restaurar lo que consideran los valores fundamentales de la nación.
La reacción de su oponente, Kamala Harris, fue notablemente silenciosa en la noche electoral, lo que generó especulaciones sobre el futuro político del partido demócrata y su estrategia para enfrentar el resurgimiento de Trump.
Este nuevo capítulo en la política estadounidense no solo representa un cambio de liderazgo, sino también un retorno a las políticas y retóricas que caracterizaron su primera administración. Con un electorado dividido y un país que enfrenta desafíos significativos, el camino hacia adelante será crucial para Trump y su administración
Las propuestas de Trump
Durante su campaña, el ahora presidente prometió revertir muchas de las políticas promulgadas desde que dejó el cargo.
Las principales temáticas que vuelven a estar en agenda son la inmigración, salud, narcotráfico, educación, justicia y género.
Asimismo manifestó que planea terminar de construir el muro entre EE.UU y México, expulsar indocumentados, aplicar más aranceles a las importaciones y aumentar la producción energética estadounidense.
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