El consumo de carne vacuna experimentó una baja en el primer bimestre del año, alertando sobre un posible agotamiento en la demanda. Hay preocupación en el sector ganadero.
El consumo per cápita de carne vacuna descendió durante los dos primeros meses del año. Así lo informó un estudio del mercado ganadero Rosgan, perteneciente a la Bolsa de Comercio de Rosario. Según el informe presentado este lunes, el consumo cayó a 44 kilos per cápita, en comparación con los 48,5 kilos registrados en el bimestre anterior.
Los números
El estudio destacó que esta disminución refleja “señales de agotamiento” en la demanda de carne vacuna, a pesar de una tendencia decreciente con precios reales estables. A lo largo del año 2023, el consumo anual de carne vacuna había alcanzado los 52,4 kilos por persona, marcando un incremento del 7% con respecto al año anterior.
Sin embargo, en términos de precios reales, descontando la inflación, se observó una baja promedio del 7% anual, lo que podría significar una resistencia a nuevos aumentos de precios.
El informe señala además que ante el aumento de precios estacional que suele ocurrir de marzo a junio, es probable que estos se mantengan relativamente estables.
Otros factores
La competencia de otras carnes más económicas, como la de pollo o cerdo, que están ganando terreno en la preferencia del consumidor, también impactó en el resultado final.
En relación a la decisión de la Secretaría de Comercio de reducir impuestos a la importación de alimentos básicos con el objetivo de estabilizar los precios, Rosgan estimó que, si bien no se espera un efecto directo en la carne vacuna, sí se anticipa una mayor competencia en el mercado, especialmente por parte de la carne de cerdo, cuyos precios más accesibles hacen que crezca su demanda.
Comentarios