Tras el crimen del colectivero, el ministro de Seguridad de la Nación mostró un nuevo punto de discordancia con su par provincial. Sin embargo, dijo que hablaron luego de la agresión que sufrió el funcionario bonaerense en la Avenida General Paz y que “están las cosas ordenadas”
El ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, manifestó su desacuerdo con los procedimientos llevados a cabo por la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI) en colectivos del conurbano bonaerense como respuesta al asesinato del chofer de colectivo Daniel Barrientos. Esta polémica surgió después de que efectivos de esta fuerza comenzaran a realizar operativos en los que hacen descender a los pasajeros para revisar sus pertenencias, además de cachearlos.
Aunque Fernández ha expresado su desacuerdo, y ha marcado diferencias con su colega de la Provincia, Sergio Berni, ha querido dejar claro en una rueda de prensa que las cosas “están ordenadas” entre ambos distritos, y que mantiene un diálogo con Berni al respecto.
Fernández aseguró que no aplicaría esta medida como parte de las tareas que realizan las fuerzas federales que están bajo su comando (Gendarmería, Prefectura y la Policía Federal), y explicó que en toda la zona están subiendo a los colectivos y pidiendo documentos, pero no haciendo el cacheo.
En cuanto a la presencia de la Gendarmería en territorio bonaerense, Fernández ha afirmado que el trabajo de esos efectivos “es muy fuerte” y ha resaltado que se decidió hace dos meses en una reunión de la que participó el presidente Alberto Fernández y el jefe de Gabinete de la Provincia, Martín Insaurralde. Además, afirmó que los resultados obtenidos son muy buenos.
Comentarios