Faustino Oro ganó importantes competencias a nivel nacional e internacional, superando puntajes de jugadores legendarios.
El joven prodigio argentino del ajedrez, Faustino Oro, obtuvo su primera norma de Maestro Internacional con tan solo nueve años de edad, luego de su destacado desempeño como subcampeón en el ITT Copa Ciudad de Comodoro Rivadavia, donde consiguió 6,5 puntos en 9 rondas.
Durante el pasado fin de semana se llevó a cabo el torneo ITT Copa Ciudad de Comodoro Rivadavia, el cual fue conquistado por el gran maestro Diego Flores, quien finalizó invicto con 7,5 puntos de 9. El segundo lugar fue para la promesa del ajedrez argentino y mundial, Faustino Oro.
Este joven talento estuvo rompiendo récords en el mundo del ajedrez: fue el número 1 mundial en la categoría Sub 8 y en abril de este año se convirtió en el maestro FIDE más joven de la historia. Actualmente, no solo es el mejor jugador Sub 10, sino también el mejor Sub 11, con un puntaje ELO de 2.335, dejando atrás ampliamente a sus competidores más cercanos.
En el torneo disputado en la ciudad sureña este fin de semana, Faustino Oro obtuvo el segundo puesto con 6,5 puntos en 9 rondas. Logró mantenerse invicto con cuatro victorias y cinco empates, dos de ellos contra los grandes maestros Neuris Delgado Ramírez (Paraguay, 2.548) y Diego Flores (2.534), el ganador del torneo con 7,5 puntos.
Otros récords de Faustino
El pequeño rompió barreras al convertirse en el primero en alcanzar los 2.200 y posteriormente los 2.300 puntos ELO. A sus nueve años, 10 meses y 27 días, Faustino logró su primera norma de Maestro Internacional, aunque aún le faltan dos años para obtener ese título.
Con la mirada puesta en la medalla, Faustino buscará superar el récord del estadounidense Abhimanyu Mishra, quien se convirtió en maestro internacional a los 10 años, y luego en el gran maestro más joven de la historia a los 12 años.
Además, Faustino ha logrado superar en edad las marcas de otras leyendas del ajedrez como Bobby Fischer, Garry Kasparov y el propio Magnus Carlsen. Su futuro en el ajedrez se presenta prometedor y sin límites.
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