A pesar de la leve recuperación de ingresos y el aumento del crédito, el consumo en septiembre siguió en retroceso.
El consumo en supermercados registró una caída interanual del 18% en las primeras tres semanas de septiembre, según datos de la consultora Scentia. Esta baja se suma a una disminución acumulada del 12% al 13% en lo que va del año, marcando un preocupante retroceso en las ventas.
El informe de Scentia refleja la persistente caída del consumo, que ya había mostrado una baja del 17,9% en agosto, con un acumulado anual del 11,9%. A pesar de la leve mejora en los salarios y el aumento del crédito, el consumo parece no reaccionar, destacando una desconexión con la recuperación de ingresos en algunos sectores.
Informes
La consultora Analytica explicó esta situación en su informe titulado “El consumo no acompaña la mejora de los ingresos”, señalando que los salarios privados registrados mostraron un crecimiento real del 10,8% desde abril, mientras que el salario público también evidenció una leve recuperación. Sin embargo, los gastos en servicios como electricidad, gas y transporte aumentaron a un ritmo mucho mayor, limitando el poder de compra de los hogares.
En julio, las ventas en supermercados y autoservicios cayeron un 16,1%, siendo el nivel promedio más bajo desde 2017, con datos de ventas minoristas que también muestran una caída mensual del 1,6% en agosto. A pesar de un leve repunte en el crédito con tarjeta, el incremento de gastos en servicios continúa afectando la capacidad de consumo de los argentinos.
Supermercadistas esperan que las promociones y descuentos, junto con la temporada de verano, logren reactivar el consumo en productos como bebidas alcohólicas y snacks, que también sufrieron caídas significativas en las ventas.
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