Newell’s había llegado a un acuerdo con Vasco da Gama para concretar la salida de Ian Glavinovich. Sin embargo, la documentación llegó tarde.
Newell’s y Vasco da Gama habían llegado a un acuerdo para concretar el pase de Ian Glavinovich. Sin embargo, la Lepra envió tarde la documentación y llegó cuando el mercado de pases en Brasil ya había cerrado. En efecto, la operación no pudo concretarse.
Sin lugar en el equipo de Sebastián Méndez, el defensor comenzó tratativas para sumar minutos en otro club. Hace tiempo llegó una oferta del Vasco da Gama, pero que no convenció. Los brasileños ofertaron 210 dólares por un préstamo de un año y una opción de compra de 2 millones y medio de dólares por el 80% del pase. No obstante, Newell’s rechazó el ofrecimiento.
Luego, la dirigencia del Gigante de Colina elevó el monto: 600 mil dólares por el préstamo y una opción de compra de 3 millones de dólares netos.
Esa fue la propuesta que aceptó la comisión directiva rojinegra. Una vez cerrada la operación, sólo restaba enviarse la documentación de Glavinovich, lo cual debía hacerse antes de que cerrara el libro de pases en Brasil, lo cual estaba previsto para las 23.59 del 2 de septiembre. Pero, según indicaron desde el país vecinos, los papeles llegaron después de ese horario y el pase se cayó.
Un antecedente del insólito error
Si bien la equivocación es insólita, hace poco pasó algo similar en Boca. No fue por el traspasado de un futbolista a otro club, sino que tuvo que ver con la inscripción de refuerzos para disputar la Copa Sudamericana.
Por un error administrativo, el Xeneize no pudo contar con Gary Medel, Tomás Belmonte, Brian Aguirre ni Milton Giménez, ya que el mail a la CONMEBOL para informar las incorporaciones llegó 43 minutos tarde, porque no consideraron el horario en Asunción, Paraguay.
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