El actor es acusado por su ex asistente Graham Chase Robinson, quien trabajó 11 años para él.
Robert De Niro compareció este martes 31 de octubre en un tribunal de New York para testificar. Lo hizo en el marco de la demanda que le entabló su ex asistente, Graham Chase Robinson. La mujer lo acusa de violencia de género y de propiciar un ambiente laboral hostil. Robinson trabajó 11 años para el aclamado actor.
La ex asistente sostuvo que el actor “la trataba como a una esclava” y que incluso la obligaba a realizar tareas que no estaban contempladas. También afirma haber sido víctima de comentarios sexistas.
En la audiencia, De Niro se mostró molesto frente a las preguntas que le hacía Andrew Macurdy, abogado de Robinson.
La disputa legal entre ambos comenzó en 2019, cuando el artista demandó a la mujer por robo y desvío de fondos. También la señaló por sustraer 5 millones de puntos para vuelos. Además, la ex asistente fue denunciada por “ver Netflix en horario laboral” y usar la tarjeta de crédito del actor para gastos personales.
Robert De Niro pretende una compensación equivalente a tres años del sueldo de la mujer. Robinson percibía 300.000 dólares al año.
Sin embargo, Robinson, que también llegó a ser presidenta de la empresa del actor, inició una contrademanda. Además de los hechos mencionados anteriormente, agregó que De Niro la insultaba, le pedía que le lavara la ropa y le cocinara, algo para lo que no había sido contratada. La asistente reclama 12 millones de dólares.
En el descargo, el actor negó las acusaciones aunque en algunos pasajes de su testimonio se mostró contradictorio, afirmando que los hechos que la mujer narraba “no eran tan así”.