La otitis en la piscina es una afección común durante el verano. Algunas recomendaciones para disminuir la posibilidad de infección.
Mantener el oído limpio
Es importante mantener el oído limpio para prevenir la otitis. Pueden hacerlo utilizando productos específicos para la limpieza del oído o simplemente secando bien el oído después de salir del agua.
Evitar la acumulación de agua en el oído
Evitar que el agua se acumule en el oído después de nadar. Pueden inclinar la cabeza hacia un lado y moverla suavemente para ayudar a que el agua salga del oído. También se recomienda utilizar tapones para los oídos para evitar que el agua entre en el canal auditivo.
Evitar la exposición prolongada al agua
Reducir el tiempo que pasan en el agua puede disminuir la posibilidad de desarrollar otitis. Limitar el tiempo que pasa nadando y asegurarse de descansar y secar bien los oídos después de salir del agua.
Evitar la entrada de agua en la nariz
La entrada de agua en la nariz puede aumentar el riesgo de otitis. Pueden utilizar pinzas para la nariz o tapones nasales para evitar que el agua entre en la nariz mientras nadas.
Consultar a un médico si se presentan síntomas
Si experimenta dolor de oído, picazón o cualquier otro síntoma de otitis después de nadar en la piscina, es importante consultar a un médico. El médico podrá evaluar los síntomas y recomendar el tratamiento adecuado.
Estas recomendaciones pueden ayudar a disminuir la posibilidad de otitis por la piscina, pero no garantizan una prevención completa. Siempre es importante cuidar la salud y consultar a un profesional médico si hay alguna preocupación o síntoma persistente.
