La inflación alcanzará su punto más alto en tres décadas durante las elecciones generales. Las monedas alternativas experimentaron un aumento significativo tras la debilidad de las reservas.
La cercanía de las elecciones generales del 22 de octubre, que podrían determinar al próximo presidente, reflejan una economía con diversas debilidades, algunas aún más pronunciadas que durante las PASO en agosto.
La inflación aumentó, el dólar oficial y paralelo experimentaron un salto significativo, los salarios aún esperan saber si las medidas tomadas en los últimos 45 días podrán mitigar el impacto de la devaluación y la aceleración de precios, mientras que la actividad económica busca mantenerse a flote en este contexto.
Los últimos indicios que mostraron que la economía, justo antes de las elecciones, evidencian una dinámica cambiaria tensa a lo largo de octubre. Los analistas del sector privado se sorprendieron con el dato de inflación de septiembre, ya que esperaban una cifra por debajo del 12,7% informado por el Indec.
Inflación
Después de las PASO, se conocieron dos datos de aumento de precios que fueron los más críticos. Estos estuvieron fuertemente influenciados por el hecho central para la economía de los últimos meses: la devaluación del tipo de cambio oficial en el primer día después de las elecciones primarias, que llevó al dólar mayorista a $350, y se mantuvo en ese valor desde entonces.
El impacto fue inmediato. El índice de precios de agosto, con solo medio mes de incorporar la devaluación, fue del 12,4%, lo que hizo que el IPC alcanzara los dos dígitos mensuales por primera vez en dos décadas.
En septiembre, no hubo desaceleración como se esperaba en el mercado y, hasta principios de octubre, en los despachos oficiales. Septiembre registró un aumento del 12,7%, elevando el acumulado de los primeros nueve meses de 2023 a más del 100%.
“Con el dato de septiembre, el IPC anota su bimestre de mayor variación febrero-marzo de 1991. Lamentablemente, con el último dato, Argentina registra su inflación anual más grande en 32 años. Con los primeros datos de octubre, el ritmo de suba de los precios apuntaba a que el IPC del mes volvería a estar en un dígito y cerraría por debajo del 10 por ciento. Sin embargo, con la profundización de la corrida contra el peso y el arrastre de septiembre, lo más probable es que el mes vuelva a estar en los dos dígitos”, estimó el analista de Libertad y Progreso Eugenio Marí.
