El papa Francisco sigue internado en Roma por una neumonía bilateral. Aunque su estado de salud mostró una leve mejoría, los médicos mantienen la cautela.
El papa Francisco, de 88 años, sigue internado en el Hospital Gemelli de Roma mientras recibe tratamiento por una neumonía bilateral. Aunque su estado sigue siendo crítico, el Vaticano informó que pasó una noche tranquila y su evolución es monitoreada de cerca por los médicos.
🔴Oficina de Prensa de la Santa Sede sobre la salud del Papa Francisco: "La noche ha transcurrido bien, el Papa durmió y está descansando".
— Vatican News (@vaticannews_es) February 24, 2025
El último parte médico indicó que Francisco continúa con oxígeno de alto flujo y que su insuficiencia renal leve sigue bajo control. Además, los análisis mostraron una leve mejoría en sus niveles de hemoglobina tras recibir transfusiones, mientras que su trombocitopenia, detectada días atrás, se mantiene estable.
A pesar de estos avances, su estado de salud genera preocupación. Durante el fin de semana, sufrió un episodio asmático prolongado que llevó a los médicos a reforzar los cuidados. La combinación de su edad y sus antecedentes de problemas respiratorios complican el cuadro, por lo que su evolución es incierta.
El papa Francisco, que fue hospitalizado el 14 de febrero, agradeció las muestras de apoyo recibidas y destacó la labor del personal médico que lo atiende. En un mensaje difundido por el Vaticano, aseguró que sigue su tratamiento con confianza y que el descanso forma parte de su recuperación.
Aunque el Pontífice se mantiene estable, el equipo médico pidió prudencia. Su internación sigue sin una fecha clara de alta, mientras el Vaticano monitorea la situación y ajusta la agenda papal en función de su estado de salud.
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