Funcionarios de Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos se manifestaron en rechazo al cierre del Hospital Bonaparte, ubicado en la Ciudad de Buenos Aires.
Voces de Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos se alzaron en rechazo al cierre del Hospital Bonaparte de la Ciudad de Buenos Aires. La medida fue tomada por el Gobierno nacional bajo el argumento de la falta de pacientes. Sin embargo, esta decisión generó un profundo malestar entre los ministros de Salud de la Región Centro.
Los funcionarios, encabezados por Silvia Ciancio, Ricardo Pieckenstainer y Guillermo Grieve, expresaron su inquietud por la discontinuidad en la atención a los usuarios del hospital. Además, se refirieron al impacto negativo en los derechos tanto de pacientes como de trabajadores del establecimiento.
En un comunicado conjunto, los ministros destacaron que el cierre del Hospital Bonaparte desatiende las necesidades críticas de salud mental de la población. Asimismo, aseguraron que compromete la continuidad de servicios esenciales como las guardias y las internaciones. Esta situación, según advirtieron, agrava aún más el complejo panorama sanitario actual.
También hicieron hincapié en la importancia de garantizar la estabilidad laboral de los profesionales de la salud mental, quienes desempeñan un rol fundamental en el bienestar y la recuperación de los pacientes. En este sentido, instaron al Estado nacional a clarificar de manera urgente los planes para asegurar una atención adecuada y a dialogar de manera transparente con todos los actores involucrados.
“La protección de la salud mental de la población debe ser una prioridad absoluta”, concluyeron los funcionarios, subrayando la necesidad de acciones concretas que resguarden los derechos humanos en el ámbito de la salud pública.
Vale destacar que esta controversia se enmarca en un contexto más amplio de reformas y reestructuraciones en el sistema de salud mental del país, donde persiste el debate sobre la efectividad y el alcance de las políticas implementadas.
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