La poca agua en el río Paraná se hace más notoria con el paso de las semanas y la falta de lluvia agrava la situación. No se emitieron alertas de tormentas momentáneamente.
Los niveles del agua del río Paraná generan preocupación en los ciudadanos y afectan actividades como la exportación en el Gran Rosario, complicando el volumen de cargas de ciertos buques.
El climatólogo Mario Navarro, en entrevista con RLC Noticias, indicó que “la bajante de agua en el río Paraná es consecuencia de que no llovió lo suficiente en altura, arriba en Brasil. La última lluvia que hubo en corriente fue a fines de mayo, principios de junio”.
Por otra parte, Gonzalo Ratner, Director General de Gestión de Riesgo y Protección Civil Municipalidad de Rosario, dijo que “no es inusual esta bajante del río para un período de lluvias por debajo de lo normal, para lo que se dio en esta temporada y lo que se espera para el próximo trimestre”.
Ratner informó que se esperan lluvias por debajo de lo normal y temperaturas por encima de lo normal en septiembre, octubre y noviembre, por lo que el río Paraná seguirá con niveles bajos, siempre por debajo del metro.
Consecuencias
Esta situación genera consecuencias que afectan distintas actividades, el funcionario explicó que la principal en esta época del año tiene que ver con la navegación. “Sabemos que la navegación creativa tiene más riesgo porque cambia la geografía de la costa, hay zonas que habitualmente están debajo del agua, y que con estos niveles hay afuera troncos, rocas, raíces de árboles, por eso hay que navegar a una velocidad prudencial y siempre a una distancia también prudencial de la costa, no muy cerca porque puede haber más chances de accidentes”.
“Respecto al tema del monitoreo de las barrancas de la zona costera también es peligroso, porque cuando falta la presión del agua sobre la barranca al estar tan bajo aumentan las chances de hundimiento o desmoronamiento en esa zona”, añadió.
Otro de los problemas que genera la poca agua en el río tiene que ver con las zonas habilitadas para bañarse, “la zona habilitada para bañarse se ve reducida y está muy cerca. Tenés un descenso abrupto y gran profundidad para los bañistas y hay mayor riesgo de ahogamiento asi que se debe tener mucho cuidado y solo bañarse en lugares permitidos, señalizados y respetar las recomendaciones”.
Imágenes de Rosario, Arroyo Ludueña, afluente del Paraná.
Comentarios