El fotógrafo Pablo Grillo sufrió graves heridas en la cabeza durante la violenta represión policial en la marcha de jubilados.
Pablo Grillo, el fotógrafo herido en la represión policial durante la marcha de jubilados, continúa en terapia intensiva tras someterse a una compleja cirugía en el Hospital Ramos Mejía. Su estado sigue siendo crítico y el pronóstico reservado, aunque los médicos lograron reducir la presión intracraneal y reconstruir parte del tejido afectado. La respuesta pupilar mostró una leve mejoría, pero los próximos días serán decisivos para su evolución.
Grillo sufrió un traumatismo de cráneo grave luego de recibir el impacto de un cartucho de gas lacrimógeno en la cabeza. La violencia del golpe provocó múltiples fracturas y pérdida de masa encefálica. El ataque ocurrió mientras la policía reprimía a manifestantes, jubilados y trabajadores de prensa cerca del Congreso.
El hecho generó indignación entre familiares y organizaciones de derechos humanos, que exigieron explicaciones al Ministerio de Seguridad, encabezado por Patricia Bullrich. Señalaron la represión como una muestra de abuso de poder y reclamaron justicia para Grillo y las demás víctimas de la violencia estatal.
En medio de la angustia, la familia del fotógrafo apeló a la solidaridad y pidió donantes de sangre de cualquier grupo y factor. Quienes puedan colaborar deberán acercarse el jueves 13 de marzo por la mañana al Hospital General de Agudos José María Ramos Mejía, en General Urquiza 609, Ciudad de Buenos Aires, con DNI y especificando que la donación es para Pablo Grillo.
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