Lo aguantó hasta donde pudo, pero no alcanzó. Las actuaciones del árbitro y el VAR dejaron mucho que desear y perjudicaron a la Lepra.
Menos de media hora había pasado cuando Rey Hilfer expulsó a Banega. Fue una jugada particular por la que él mismo había decido amonestarlo, pero el VAR consideró que era roja. A partir de ese momento el partido cambió.
Si bien la Lepra hizo méritos y lo aguantó, terminó perdiendo 2 a 0 frente al Pincha en la previa del clásico. Con un Macagno figura y una defensa firme, el marcador se abrió recién a los 38′ del segundo tiempo a través de un rebote. El segundo llego en el tiempo adicional.
Claro está, estas situaciones cambian todo lo planificado. Y en esta ocasión no sólo lo que el cuerpo técnico había planeado para el partido ante Estudiantes, sino también en lo que respecta al clásico. Es que la baja del 10 leproso es una muy sensible. Larriera tendrá esta semana para analizar quién será el mejor responsable en un choque muy importante.
En este marco, analizar el duelo parece complicado, principalmente porque la expulsión condicionó el resto del partido. Además, avanzados los minutos, Sosa le dio una patada de atrás a Velázquez que, esta vez, el árbitro interpretó que no era para roja. Situación que, por supuesto, generó más bronca.
Debe pensar en lo que viene
El partido parecía que se moría en el 0 a 0. Era un resultado justo porque cómo se había dado todo y porque la Lepra se esforzó en todo momento. Sin embargo, un remate de Palacios se desvió en Mauro Méndez y descolocó a Macagno. A los pocos minutos vino el 2 a 0. Ahora, Newell’s está obligado a dar vuelta la página, sacarse la broca y pensar en lo que viene. El domingo recibirá nada menos que a Central con la necesidad de ganar.
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