Las fuerzas asumieron el control de cárceles con el objetivo de combatir a las bandas criminales.
Esta medida, anunciada por el Gobierno liderado por Xiomara Castro, ha generado diversas críticas.
Según informa la BBC, el secretario de Estado de Defensa Nacional de Honduras, José Manuel Zelaya Rosales, ha señalado que el objetivo de esta operación es evitar que estos centros penitenciarios sigan siendo focos de delincuencia.
En este sentido, los agentes hondureños han llevado a cabo confiscaciones de armas, teléfonos satelitales, granadas y drogas en las celdas de los reclusos, con el fin de tomar el control de las prisiones durante un año.
Esta intervención militar se produce días después de que 46 reclusas fallecieran en un motín en una prisión cercana a Tegucigalpa. Supuestamente estuvieron involucrados miembros de las pandillas rivales Barrio 18 y Mara Salvatrucha.
En respuesta a estos hechos, la mandataria ha decretado un toque de queda desde las 21:00 hs hasta las 4. En las ciudades de Choloma y San Pedro Sula, dos localidades que han sido afectadas por la violencia.
Esta restricción estará en vigor durante 15 días, con posibilidad de prórroga.
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