Este lunes, un médico que presta servicio en el hospital Eva Perón de Baigorria, fue golpeado salvajemente por familiares de una paciente. El profesional se expresó y lamentó las condiciones en las que trabajan.
Este martes la atención en el Hospital Eva Perón se vio suspendida luego de que un médico haya sido brutalmente golpeado por familiares de una paciente.
En las imágenes de la cámara de seguridad del hospital que se viralizaron se observa el momento en el que el médico es golpeado. Recibió patadas y trompadas en la cabeza y la cara por varias personas.
Según lo relatado, todo ocurrió en la tarde de este lunes cuando un hombre comenzó a gritar en la guardia del hospital para que atiendan a una pariente. Indicaron que no se trataba de una emergencia ni de gravedad pero el hombre continuaba demandando.
Pasado un momento, la policía y el guardia privado entraron a la guardia para pedir ayuda porque el familiar de la paciente se había desvanecido allí fue cuando el médico, quien salió a ayudar, recibió golpes.
La palabra del médico
Leandro Giordana, el profesional médico, víctima de la golpiza escribió: “El del video soy yo. Ayer me tocó a mi recibir una paliza de parte de un paciente en la guardia del Hospital Escuela Eva Perón de la ciudad de Granadero Baigorria”.
Agregó: “ser médico es una forma de vida, de ayudar a los demás, a quiénes necesitan un antibiótico, un yeso o simplemente que lo escuchen”.
“Porque quiero ayudar, soy docente en la UNR hace 14 años, me rompo el lomo formándome como residente NO RENTADO de 4° año de Terapia Intensiva y estoy haciendo el posgrado de Medicina Legal y Forense”.
Lamentó también que “ser médico también se transformó en un laburo con condiciones deplorables. A una sociedad que está hundida en la pobreza y la violencia, los responsables de esto, los gobernantes, hacen casi todo mal hace muchos años y solo generan que esto empeore y se profundice”.
“Salarios de miseria, condiciones inhumanas donde muchas veces no tenemos agua, luz, calefacción o refrigeración, no tenemos ni donde comer o la comida es incomible. Siempre se nos exige más. Jornadas de 24 hs., 36 hs., 48 hs. Porque el personal de salud siempre tiene que estar. A esa violencia y precarización que nos someten los de arriba, se le suma la violencia de la población. Y nosotros no tenemos garantías de seguridad para poder cuidar a la población”. Expresó “parece que tenemos que seguir como si nada hubiera pasado, porque nada cambia, nada frena”, reclamando que “los que nos gobiernan tienen que tomar medidas que nos ayuden, que se cuide a los que cuidamos. Que se invierta en salud, educación, en trabajo digno y en seguridad”.
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