La Ley de Microtráfico, impulsada por el gobierno provincial de Santa Fe, permitió la desarticulación de más de 50 búnkers en toda la provincia. Este jueves, se llevó a cabo una nueva intervención en Rosario.
Este jueves la Policía de Santa Fe, en conjunto con el Ministerio de Justicia y Seguridad y el Ministerio Público de la Acusación (MPA), derribó otro búnker de drogas en Rosario, en la calle Dr Riva 2050.
Este operativo se enmarca en la Ley de Microtráfico, una legislación provincial que la Asamblea sancionó a finales de 2023 y que ha transformado la forma en que las autoridades abordan el narcotráfico a nivel local.
El ministro de Justicia y Seguridad, Pablo Cococcioni, junto a los fiscales Pierantoni y Carbone, supervisaron la intervención.
Cococcioni destacó que el operativo marca una “segunda etapa” en la política de microtráfico, donde las investigaciones se planifican para atacar directamente los puntos de venta de drogas que afectan a la comunidad, en lugar de surgir solo de otros delitos.
La ley, que comenzó a regir a principios de 2024, ha permitido la destrucción de más de 50 búnkeres en toda la provincia, lo que ha contribuido a la disminución de la violencia y el crimen en las zonas más afectadas. Según Cococcioni, las estadísticas de criminalidad muestran una disminución significativa, con la provincia registrando el número más bajo de homicidios en las últimas décadas.
Además, los fiscales Pierantoni y Carbone explicaron que la comunidad inició este operativo al presentar una denuncia vecinal que alertó sobre la venta de drogas en la zona.
El allanamiento resultó en la detención de dos personas y el secuestro de droga, lo que llevó a más arrestos y a una investigación en curso.
Lucha contra el narcotráfico
El derribo de búnkeres y la detención de traficantes son pasos cruciales en la lucha contra el narcotráfico en Santa Fe. La Ley de Microtráfico no solo está desmantelando estructuras ilegales, sino que también está restaurando la tranquilidad en los barrios afectados.
Los resultados son prometedores y marcan un hito en la política de seguridad y justicia de la provincia, aunque aún queda trabajo por hacer.
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