A días del comienzo de los Juegos Olímpicos, el Gobierno de Francia impulsó una medida contra los habitantes más pobres.
Faltan pocos días para que comiencen los Juegos Olímpicos 2024 en París. En este contexto, el Gobierno de Francia impulsó una polémica medida contra los habitantes más pobres. Es que la gestión de Emmanuel Macron desalojó a los migrantes que viven en las calles y los trasladó a otras regiones del país.
La intención es que no estén en la capital, el punto geográfico que recibirá a cientos de atletas y turistas entre el 26 de julio y el 11 de agosto.
Sobre la medida
Para llevar a cabo esta decisión, las autoridades de Francia les prometieron a los damnificados que tendrían donde quedarse hasta que puedan regresar. No obstante, por ahora no les dieron más información y la mayoría se ubican en edificios abandonados de otras zonas de la ciudad. Según relataron, a muchos la Policía les colocó una pulsera para identificarlos y los obligó a subirse a micros con diversos destinos.
La polémica medida del Gobierno francés fue dada a conocer por The New York Times. El medio estadounidense realizó una crónica en la que detalló la situación actual en París. El lugar al que llevaron a estas personas está en las afueras de la ciudad, relataron. Se trata de “un hotel gris de tres plantas“. “Al llegar, no encontramos ni personal ni asistentes sociales. Las habitaciones eran pequeñas, con dos camas individuales una al lado de la otra”, relataron.
Si bien muchas versiones oficiales explican que se trata de una cuestión de organización de la ciudadanía y no tiene que ver con los Juegos Olímpicos, la oposición asegura que la motivación de esta decisión fue que la Villa Olímpica está ubicada cerca de uno de los barrios más pobres de París. Consecuentemente, autoridades regionales -quienes recibieron a los migrantes expulsados-, mostraron su enojo al respecto.
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