El precandidato a jefe de Gobierno porteño del PRO propone que las mujeres víctimas violencia de género tengan acceso a armas eléctricas como medida de autodefensa.
Jorge Macri, precandidato a jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y primo del expresidente Mauricio Macri, lanzó una propuesta que ha generado controversia: equipar a las mujeres amenazadas de muerte con armas Taser como medida de autodefensa contra sus agresores.
En su cuenta de Twitter, Macri cuestionó por qué las víctimas de violencia de género no pueden portar armas letales para protegerse. La iniciativa consiste en dotar de armas Taser, un dispositivo eléctrico considerado “de tortura” por los organismos de derechos humanos, a las mujeres que tienen denuncias de amenazas registradas en la Justicia.
En el mismo mensaje, el ministro de Gobierno porteño contó que hace muy poco tuvo una charla con Alexander Polit, fabricante de Taser y director regional para Latinoamérica y el Caribe de Axon, y le preguntó sobre el uso civil de estas armas. polit afirma que existe una versión especialmente diseñada para uso civil, la Taser Bolt 2, de menor tamaño y menor alcance que la versión policial.
En un hilo de Twitter, el intendente de Vicente López explicó que las armas Taser Bolt 2, diseñadas especialmente para uso civil, no son armas ofensivas, sino armas de huida. Al disparar los dos dardos, se descarga energía eléctrica durante 30 segundos, lo que le da tiempo a la víctima para escapar. Además, al combinarse con una aplicación, la descarga activa automáticamente un mensaje de alerta con la localización del dispositivo y un llamado urgente al 911 para una intervención inmediata de la policía.
El uso de estas armas está aprobado en 49 estados de EE.UU. y países como México y Colombia estudian proyectos de ley para permitir su uso en situaciones de autodefensa. Sin embargo, en Argentina, la iniciativa ha generado un fuerte debate debido a la violencia de género que azota al país y la posibilidad de que las armas sean utilizadas de manera inapropiada.
El planteo de Macri ha sido criticado por distintos sectores, quienes señalan que la solución a la violencia de género no puede ser armar a las víctimas, sino trabajar en la prevención y protección de las mismas. Mientras tanto, las disputas internas del PRO continúan, con nombres que suben y bajan en la carrera electoral.
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