El proyecto de Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) fue duramente cuestionado en el Senado de la Nación.
En un plenario de comisiones de la Cámara de Senadores de la Nación, representantes de la industria santafesina expresaron sus objeciones al Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI), una iniciativa del gobierno de Javier Milei que propone incentivos fiscales, cambiarios y jurídicos por treinta años para atraer a grandes empresas extranjeras.
Críticas desde la producción industrial
Los industriales advirtieron que el régimen, incluído en la Ley Bases que ya cuenta con media sanción de Diputados, podría generar una competencia desleal contra las pymes locales y representar una amenaza para el sector manufacturero nacional. Román Guajardo, presidente de la Unión Industrial Región Rosario (Unirr), aseguró que “si al Polo Tecnológico Rosario le dieran esos beneficios por 30 años seríamos potencia mundial”. Por su parte, Enrique Bertini, titular de la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (Cafma), señaló: “Hay un abismo entre lo que se plantea en este proyecto y lo que pasa en una pyme”.
Propuestas para un régimen más equitativo
Javier Martin, presidente de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe), reiteró las propuestas de la entidad en un hilo de la plataforma X. Martin destacó que, aunque apoyan la creación de mecanismos para atraer inversiones, es crucial que estas tengan un impacto positivo en los encadenamientos locales y refuercen las capacidades productivas de Argentina.
“Si bien apoyamos decididamente la creación de mecanismos para atraer inversiones, también nos interesa que tengan un impacto positivo en los encadenamientos locales y que apuntalen las capacidades productivas de Argentina”, subrayó Martin. Entre las propuestas de Fisfe se incluyen establecer condiciones, límites y plazos más acotados para el régimen, además de incorporar beneficios para las pymes.
Desafíos legislativos
El debate en el Senado continúa mientras el oficialismo busca los votos necesarios para aprobar el proyecto. Las críticas y propuestas de los industriales santafesinos se suman a una creciente oposición que pone en jaque la aprobación del RIGI en su forma actual.
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