San Lorenzo perdió este martes ante Atlético Mineiro por 1-0 en Belo Horizonte por Copa Libertadores y las fuerzas de seguridad agredieron a simpatizantes argentinos.
San Lorenzo cayó este martes ante Atlético Mineiro por el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores 1-0 con gol del argentino Rodrigo Battaglia a los 65 minutos. Sin embargo, otra vez la violencia en las tribunas le quitó el protagonismo a lo que sucedía dentro del rectángulo de juego. Faltando 10 minutos para el fin del duelo, la policía brasileña comenzó a agredir a los hinchas del “cuervo”.
Los gases lacrimógenos que lanzaron llegaron al terreno de juego y terminaron afectando a los propios jugadores. Incluso hinchas locales también sufrieron los efectos de la injustificada represión de la policía.
No es la primera vez que esto ocurre en Brasil. Hace algunos meses por eliminatorias sudamericanas el partido entre la verdeamarela y Argentina también se vio opacado por hechos de violencia hacia simpatizantes albicelestes.
Si nos vamos más atrás en el tiempo, la misma historia se repitió en la final de la Copa Libertadores entre Fluminense y Boca. La llegada de equipos argentinos a tierras brasileñas predispone increíblemente a las fuerzas de seguridad del país vecino, que no parecen tener límites a la hora de ejercer su autoridad.
El partido estuvo demorado durante diez minutos hasta que los gases se disiparon. San Lorenzo se vuelve con las manos vacías y con la bronca de haber visto a su gente tan maltratada, algo que no puede volver a repetirse.
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