Franco fue desaparecido en octubre de 2014 mientras visitaba a un familiar en Rosario. Es otro caso de violencia institucional a manos de la policía.
Ramón Casco, padre de Franco, quien fue víctima de desaparición forzada y asesinato a manos de la policía, espera “una buena condena” tras 9 años de búsqueda de justicia. Hay 19 policías acusados de estar involucrados en la desaparición, tortura y muerte de su hijo. Franco, un joven albañil de 20 años, fue desaparecido en octubre de 2014 mientras visitaba a un familiar en Rosario y su cuerpo fue encontrado en el río Paraná tres semanas después.
El caso de Franco puso de manifiesto la violencia institucional y las prácticas abusivas dentro de la comisaría 7ª, donde se cree que fue detenido y sometido a golpes y torturas que finalmente le causaron la muerte. La acusación presentada por el fiscal federal Fernando Arrigo y los representantes legales de la familia sostiene que su cuerpo fue sacado de la comisaría durante un corte de luz y arrojado al río Paraná.
Ramón espera que se haga justicia por su hijo y por la memoria de su difunta esposa, Elsa, quien también luchó incansablemente por encontrar respuestas antes de fallecer en 2016. “Solo esperamos una buena condena. Nada más. Porque a mi hijo no lo tengo más. Y tampoco lo voy a tener más, pero por lo menos quiero que descanse en paz, él y la mamá”, expresó Ramón.
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