Falleció, a sus 79 años, María Josefa Bonazza quien sobrevivió al derrumbe del Apart Hotel Dubrovnik en Villa Gesell.
Ha pasado casi un mes del colapso del Hotel Dubrovnik en Villa Gesell y la tragedia se cobró una nueva víctima. Falleció María Josefa Bonazza, conocida como “Pelusa”, la única sobreviviente de la tragedia. La mujer, de 79 años, permaneció cerca de ocho horas atrapada bajo las ruinas del hotel antes de ser rescatada.
Bonazza, quien había viajado con su esposo, Federico César Ciocchini, de 84 años, para acondicionar su departamento contiguo al edificio derrumbado, se convirtió en testigo clave del suceso. Durante su rescate, relató haber escuchado explosiones antes del desplome.
Inmovilizada entre los restos, usó técnicas de yoga para respirar mejor y realizó golpes en código Morse para atraer la atención de los rescatistas. Gracias a estas señales, Bonazza fue encontrada. Sin embargo, su esposo falleció en el incidente y se convirtió en la primera de las ocho víctimas fatales.
Además de Ciocchini, la tragedia cobró la vida de María Rosa Stefanic, antigua dueña del hotel, y Nahuel José Stefanic, su sobrino. También se llevó a varios trabajadores y huéspedes, como Fabián Javier Gutiérrez, Mariano Troiano, Ezequiel Matu, Matías Chaspman, y Dana Desimone.
Bonazza, quien sufrió fracturas en el hombro y la muñeca, fue tratada inicialmente en Mar del Plata. Luego, fue trasladada al Hospital Felipe A. Fossati, en su natal Balcarce, tras una recaída de salud que finalmente le costó la vida.
Aunque logró compartir su testimonio, las secuelas físicas y emocionales empeoraron su salud gradualmente. Su fallecimiento cierra un doloroso episodio que dejó marcada a su comunidad y a las familias de las víctimas, generando interrogantes sobre las condiciones que llevaron al derrumbe.
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