Se trata de alumnos de la escuela técnica 643. En busca de información ambiental, participaron del lanzamiento de un cohete en Falda del Cañete, Córdoba.
Junto a otros grupos del país, estudiantes de Roldán lanzaron un satélite para detectar microplásticos en el aire. Fue en el Centro Espacial Teófilo Tabanera, en Córdoba.
Los satélites son equipos que tienen el tamaño de una lata de gaseosa. Fueron elaborados por grupos de alumnos secundarios del país que buscar recolectar información sobre problemáticas ambientales. El lanzamiento fue en el marco de la competencia Cansat Argentina.
“La idea surgió porque en Argentina no hay mediciones de cuánto microplástico hay en el aire”, explicó uno de los estudiantes. Ahora, deberán esperar el análisis de laboratorio de la muestra obtenida por el satélite.
Bautizada como Luminet, la misión fue medir los índices de contaminación lumínica. La idea, luego, era llegar a un halo de proyección sobre hasta qué altura llega la contaminación. “Lo que logramos es un registro de referencia en una zona lejana a una ciudad”, comentaron. “Ahora hay que continuar midiendo para establecer comparaciones”.
¿De qué se trata CANSAT Argentina?
En sintonía con el Plan Espacial Nacional, que busca realizar actividades de educación y formación, este proyecto propone reproducir a escala todo el proceso por el cual se diseña, construye, prueba, lanza y opera un satélite.
Se trata de una iniciativa global que impulsan distintas agencias espaciales del mundo. Proponen a estudiantes construir una carga para lanzarla en un cohete. El nombre deriva de CAN (lata) y SAT (satélite) ya que el tamaño no puede superar al de una lata de gaseosa.
Sobre el proyecto de los roldanenses
La misión “Microplásticos” del satélite de R2 surgió de la inquietud de profundizar las investigaciones y estudios sobre la cantidad de partículas que se encuentran en el aire debido al excesivo uso de plásticos y su fuerte potencial de contaminación ambiental.
Una vez en el aire, toma datos de temperatura, presión atmosférica, humedad y niveles de monóxido de carbono en tiempo real y lo transmite a una estación terrena.
Por otro lado, recoge muestras de aire mediante un mecanismo automático de apertura de tubos a diferentes alturas para luego analizar en laboratorios la cantidad de microplásticos suspendidos en la atmósfera.
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