La modelo murió a los 43 años luego de estar tres meses internada por complicaciones renales. Su último deseo fue que sus restos descansaran en el Cementerio de la Chacarita.
Este miércoles se despidieron los restos de Silvina Luna. La ceremonia comenzó a partir de las 9, cuando su círculo más íntimo se acercó a una casa velatoria ubicada en el barrio de Belgrano y finalizó cerca de las 14, cuando familiares, amigos y público en general se acercaron al Cementerio de la Chacarita para darle el último adiós a la actriz.
Rocío Marengo, Fernando Burlando, Iliana Calabró, Ángel de Brito, Gustavo Conti, Ximena Capristo, entre otros, se ubicaron en el sector que tiene reservado la Asociación Argentina de Actores para los deudos de sus afiliados. El hermano de la mediática, Ezequiel Luna, encabezó la dolorosa despedida.
Antes de que el cortejo fúnebre con los restos de Luna llegara al cementerio, se había producido el velatorio de la modelo en una corta ceremonia en Casa O’Higgins, donde se habían congregado varios de sus allegados.
Luego del velatorio, el coche fúnebre partió hacia el Panteón de Actores del Cementerio de la Chacarita. Su último deseo fue que sus restos descansaran en ese lugar.
Antes de que el cajón con los restos de Silvina entrara al responso que se hizo en ese lugar, la familia de la ex Gran Hermano puso una gran foto de ella en la puerta que conmovió a los presentes.
En el interior del velatorio se colocó una pantalla con un código QR. De esa manera, las personas que asistieron pudieron rendirle homenaje a la modelo con sentidos mensajes, enviarle un abrazo o encender una vela. En el breve velatorio que hubo, un fanático le alcanzó a la familia de la modelo un regalo que generó conmoción en el entorno por la gran emoción.
Al bajar del auto, el hermano de la rosarina recibió un ramo de flores acompañado de una sentida carta. “Silvina, siempre te recordaré como esa joven alegre, espontánea y genuina. Que encuentres la paz que tanto te han quitado y que te reencuentres en un abrazo con tus papás. Te abrazo fuerte”, se leyó en el papel.
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