El umbral de agua actual del Río Paraná es de 1,10, por lo que muestra una baja de dos metros en un mes.
El Río Paraná vuelve a perder altura contabilizando una altura de 1,10. Recordemos que en mayo había una altura de 3,15. Este nivel de “aguas bajas” podría extenderse, por lo que desde Defensa Civil monitorean los parques costeros y piden prudencia a los navegantes.
El director de Gestión de Riesgo y Protección Civil de la Municipalidad, Gonzalo Ratner, remarcó que el límite de caudal de aguas bajas es de 1,64. De esta forma, si el río está debajo de ese margen se ponen en marcha una serie de monitoreos de la costa para prevenir hundimientos o desprendimientos de barrancas.
De acuerdo a los registross de caudales históricos del puerto, la altura media del Paraná para esta época del año es de 3,13 metros. Lo cierto es que la bajante del río está cambiando la fisonomía de la ciudad, sobre todo en la zona norte. Esto se debe a que las riberas se extienden y dejan ver lo que hasta hace poco era el lecho del río: arena, barro y ramas.
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