El primer semestre de 2024 en la gestión de Javier Milei cerró con una caída del 3,4% en el PBI, según el Indec. Aunque la desaceleración fue menor en el segundo trimestre, la actividad económica sigue en rojo.
La economía argentina continúa en terreno negativo durante los primeros meses de la presidencia de Javier Milei. Según datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), el Producto Bruto Interno (PBI) cayó un 3,4% en el primer semestre de 2024. Si bien la contracción fue más severa en los primeros tres meses, con un descenso del 5,2%, el segundo trimestre mostró una baja más moderada del 1,7%.
Este retroceso refleja la profunda crisis que atraviesa el país, con varios sectores claves experimentando fuertes caídas. Entre ellos, la construcción registró un desplome del 22,2% en comparación con el mismo período del año anterior, mientras que la industria manufacturera se contrajo un 17,4%. El comercio mayorista, minorista y las reparaciones también sufrieron, con una baja del 15,7%.
Desplome en la inversión y crecimiento en el agro
En términos de demanda, el rubro más afectado fue la Formación Bruta de Capital Fijo, que incluye la inversión en bienes de capital, con una caída del 29,4% interanual. Este dato subraya la desconfianza que genera el actual contexto económico entre los inversores y las dificultades para reactivar el motor productivo del país.
Sin embargo, no todos los sectores vivieron la misma suerte. La agricultura, ganadería, caza y silvicultura fue la gran excepción, con un notable crecimiento del 81,2%, lo que refleja el buen desempeño de las exportaciones y una mejora en las cosechas luego de un ciclo marcado por la sequía.
A pesar de esta destacable recuperación en el agro, el balance general sigue siendo preocupante para la economía argentina, con una reactivación que aún parece lejana en varios sectores fundamentales.
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