El lunes 3 de julio de 2023 fue el día más caluroso de la historia en todo el mundo, con una temperatura promedio global de 17.01 grados Celsius (62.62 grados Fahrenheit).
Esta temperatura superó el récord anterior de 16.92 grados Celsius registrado en julio de 2022 y agosto de 2016. Este evento resalta los peligros del cambio climático y las emisiones de carbono generadas por la quema de combustibles fósiles.
Este récord de temperatura ha sido atribuido a una combinación del cambio climático inducido por el ser humano y la aparición de El Niño, un patrón climático que ocurre cada dos a siete años debido a los patrones de viento en el Océano Pacífico y que se caracteriza por aumentar las temperaturas en todo el mundo. El Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático informa que debido a la actividad humana, la temperatura superficial global de la Tierra ha aumentado 1.1 grados Celsius durante el período de 2011 a 2020 en comparación con el período de 1850 a 1900, lo que ha causado incendios forestales, inundaciones y disminución de la disponibilidad de alimentos en todo el mundo.
La Organización Meteorológica Mundial ha anunciado que El Niño ha regresado este año y se espera que aumente las temperaturas globales durante los próximos nueve a doce meses. Además, se espera que 2024 sea similar a 2016, el año más caluroso registrado hasta ahora, debido a la combinación de El Niño y el cambio climático inducido por el ser humano.
Impacto del calor extremo
El calor extremo de este verano puso en riesgo a millones de personas en todo el mundo. China experimenta una ola de calor extremo menos de dos semanas después de que las temperaturas batieran récords en Pekín. El mes pasado, el calor extremo en India estuvo relacionado con muertes en algunas de sus regiones más pobres. La semana pasada, un peligroso domo de calor cubrió Texas y el norte de México, mientras que el Reino Unido sufrió el mes de junio más caluroso de su historia.
Estos eventos extremos son indicadores claros del cambio climático y sus impactos en el clima global. Además de las olas de calor, el cambio climático también ha provocado un aumento en las sequías, inundaciones y otros fenómenos climáticos extremos en todo el mundo. Estos eventos tienen consecuencias graves para la salud humana, la agricultura, los ecosistemas y la economía.
Perspectivas futuras y acciones necesarias
Los científicos advierten que, sin una reducción radical de las emisiones de gases de efecto invernadero, los impactos del cambio climático seguirán empeorando. Natalie Mahowald, científica atmosférica de la Universidad de Cornell, afirma que los cambios observados hasta ahora son solo el comienzo de los impactos adversos que podemos esperar.
Es necesaria una acción global para reducir las emisiones de carbono y mitigar los efectos del cambio climático. Esto implica una transición hacia fuentes de energía renovable, la adopción de prácticas agrícolas sostenibles y la implementación de políticas climáticas efectivas. Además, se requiere una mayor conciencia pública y educación sobre el cambio climático para fomentar cambios de comportamiento y estilos de vida más sostenibles.
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