Cambios en la Hidrovía: reducción de peaje en Timbúes y suspensión del dragado hacia Santa Fe

El Gobierno nacional implementó modificaciones significativas en la gestión de la hidrovía, afectando directamente a la provincia de Santa Fe.

Foto: Pausa

En un movimiento que responde a las demandas del sector agroexportador, el Gobierno implementó modificaciones significativas en la Hidrovía. Se decidió reducir el peaje para los puertos de Timbúes, alineándolo con las tarifas de otros puertos del Gran Rosario. Sin dudas es una medida que beneficiará a importantes terminales como Cofco, Renova, Dreyfus, ACA y AGD. Aunque, sin embargo, también se tomó la decisión de suspender el dragado hasta la ciudad de Santa Fe, generando un descontento en la capital provincial.

Estas modificaciones se enmarcan dentro de un nuevo contrato de “concesión transitoria” firmado entre la Secretaría de Transporte de la Nación y la Administración General de Puertos Sociedad del Estado (AGP). Según el Gobierno, el objetivo de estas modificaciones es simplificar los procesos administrativos. Asimismo, se busca establecer un marco más claro para la modernización de la hidrovía, crucial para el comercio exterior del país.

Argumentos y Reacciones

La administración actual argumenta que la reestructuración del contrato busca desburocratizar los procedimientos y mejorar la tecnología relacionada con la señalización y el dragado.

No obstante, la decisión de no dragar hasta Santa Fe ha sido criticada. Consideran que podría afectar el desarrollo del puerto de la ciudad, que históricamente ha luchado por consolidarse.

Mientras que el ajuste en el peaje, que ahora será equivalente al que se paga en Puerto San Martín, es visto como un gesto hacia las entidades del sector, como la Bolsa de Comercio de Rosario y la Cámara de Puertos Privados. Este cambio responde a la evolución del tráfico fluvial y a la necesidad de hacer más eficiente el gasto público, ajustando la profundidad del canal a su calado natural.

Vale destacar que la decisión de reducir el dragado también se interpreta como una estrategia del Gobierno en vista de la próxima licitación para un operador privado, que se espera para diciembre.

Si bien este cambio podría permitir una mayor flexibilidad en la gestión de la hidrovía, también plantea interrogantes sobre la competitividad de los puertos del sur bonaerense, que podrían enfrentar un aumento en los costos de peaje.

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