El Ministerio de Capital Humano denunció irregularidades de gran magnitud en relación con el programa de becas “Progresar”.
Durante la gestión de Alberto Fernández se implementó este programa cuyo propósito era brindar asistencia a jóvenes estudiantes para completar su educación obligatoria. Sin embargo, a través de una investigación llevada a cabo por La Libertad Avanza y una auditoría de la Sindicatura General de la Nación, se detectó una falta total de control sobre estos fondos.
Sobre la investigación y posterior denuncia
La denuncia presentada ante la Justicia señala la malversación de fondos destinados a los sectores más vulnerables, con acusaciones de “incumplimiento de deberes de funcionario público” y “fraude a la administración pública”. Consecuentemente, la ausencia de control en el otorgamiento de beneficios genera incertidumbre sobre quiénes se beneficiaron realmente de estos fondos y si estos llegaron a los estudiantes como se había previsto.
La investigación revela una serie de irregularidades, entre las que se incluye la falta de documentación respaldatoria, la inexistencia de legajos individuales por cada becado y la ausencia de certificación escolar que demuestre la escolaridad de los beneficiarios. La auditoría de la SIGEN ha calificado el caso como de “impacto alto”, subrayando la gravedad de la situación.
La denuncia también destaca la falta de acción por parte del Gobierno anterior, a pesar de las advertencias de la Sindicatura General de la Nación. Además, se halló documentación que revela un préstamo internacional de 341 millones de dólares destinado específicamente al programa de becas “Progresar”, el cual no fue debidamente auditado por ninguna autoridad nacional.
Sobre las becas
Las becas educativas “Progresar” tenían como objetivo fundamental fomentar la escolarización obligatoria y evitar la deserción escolar por motivos económicos. Sin embargo, las irregularidades detectadas ponen en duda el cumplimiento de este propósito.
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