La cuarta reducción de tasa de interés en el mes responde a la desaceleración de la inflación y afectará directamente los rendimientos de los ahorristas.
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) anunció ayer jueves una nueva disminución en la tasa de interés de referencia, pasando del 70% al 60%. Es la cuarta baja en lo que va de la gestión de Santiago Bausilli al frente de la entidad. Esta decisión, en consonancia con la desaceleración de la inflación, impactará directamente en los rendimientos de los plazos fijos.
La reducción de la tasa es consecuencia de las proyecciones de los especialistas, que estiman que la inflación podría situarse por debajo del 10% para el mes de abril.
Esta última modificación se suma a la baja del 80% al 70% que se realizó hace dos semanas.
Las consecuencias
La medida implica una nueva reducción de los pasivos monetarios del Banco Central, afectando los fondos que los ahorristas mantienen en los bancos. Esto se traduce en una remuneración por debajo de la inflación para los pases pasivos a un día, lo que conlleva a un efecto de “licuación”.
La disminución de estos pasivos es fundamental para la estabilidad financiera del Banco Central y sienta las bases para una eventual flexibilización del control cambiario.
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