La Fundación Sanar también señala la falta de controles alimentarios en el ámbito escolar y solicita medidas de control y acciones punitivas contra los incumplidores.
La Fundación Sanar afirmó que, a menos de dos años de la sanción de la Ley de etiquetado frontal, el 100% de los supermercados incumple la norma. Esto se debe, porque esconden los octógonos indicativos de los productos y ofrecen promociones o combos 2×1 de productos con exceso de grasas, calorías, azúcares, etc.
La Fundación también señala la falta de controles alimentarios en el ámbito escolar y solicita al gobierno nacional que tome medidas de control y acciones punitivas contra los incumplidores.
El titular de la Fundación Sanar, Ignacio Porras, expresó que “hay mucho incumplimiento. En los supermercados hay un 100% que incumplen porque los productos están mal ubicados en las góndolas, escondiendo los octógonos. Y de la totalidad de los productos con octógonos, el 88% está dentro de una promoción, en combos, dos por uno, algún descuento, algo que está limitado por la ley”.
“El 40% de los productos, según una medición de la Fundación Interamericana del Corazón, sigue presentando , y esto ya es un incumplimiento de los productores, productos como light o fuente de calcio o de hierro, que tampoco puede estar si presentan octógonos” expresó Ignacio.
Porras indicó que esa situación genera incertidumbre entre los consumidores “porque muchas veces el significado de light es una reducción de algunos de los componentes, que pueden ser calorías, azúcares o sal, pero eso no hace que el producto está dentro de un rango seguro, ese producto no es verdaderamente saludable”.
“La ley busca que la promoción sea en productos saludables. Eso no se ve en carne, frutas o leche sino en galletitas rellenas, gaseosas o productos que la población no necesita para comer“, acotó.
El 35% de la dieta infantil está determinada por productos con octógonos
Consultado si al tener la gente más información de los contenidos de los productos se está consumiendo de manera más saludable, el especialista afirmó: “Sí, la norma tuvo una buena recepción. Hubo una disminución en el consumo de productos y hubo quienes manifestaron consumir diferente“.
Porras aclaró, sin embargo, que uno de los puntos más importantes de la ley son las política que acompañan al etiquetado. “El hecho de que se está tratando de implementar que esos productos no entren a las escuelas es clave. Es que el 35% de la alimentación de los chicos y chicas está definida por los productos con octógonos“.
En cuanto al tiempo que demandaría poder realizar un balance de la ley, Porras fue contundente: “Van a tener que pasar años. Pensemos que se está implementando el etiquetado frontal desde el gobierno nacional, pero las provincias no terminan de garantizar el acompañamiento dentro de los entornos escolares“.
“No hay limitación de la publicidad, promoción y patrocinio dentro de esos entornos y no está garantizada la mejora de la oferta en los comedores escolares por parte de los gobiernos provinciales. Falta todo eso para poder medir el impacto de la norma”, abundó.
Comentarios