La Municipalidad de Rosario logró un hito en materia de seguridad vial, superó los 35 mil controles de alcoholemia en lo que va del año.
En un paso decisivo hacia una ciudad más segura, la Municipalidad de Rosario ha intensificado sus esfuerzos en la lucha contra la conducción bajo los efectos del alcohol.
Las cifras son contundentes: en los primeros diez meses de 2024, se realizaron más de 35 mil controles de alcoholemia, superando en un 30% la cantidad de tests realizados en el mismo período del año anterior.
Este incremento en los controles ha tenido un impacto positivo en la reducción del índice de positividad, que se ubica por debajo del 3%. Es decir, cada vez son menos los conductores que son sorprendidos al volante bajo los efectos del alcohol.
“Los resultados son muy alentadores y demuestran que estamos avanzando en la dirección correcta”, afirmó Diego Herrera, secretario de Control y Convivencia.
“El compromiso del intendente Pablo Javkin con la seguridad vial es absoluto, y esto se traduce en una mayor presencia en las calles y en una mayor conciencia por parte de los ciudadanos”.
La estrategia municipal se basa en un trabajo coordinado entre las Direcciones de Tránsito, Fiscalización del Transporte y Proximidad, en conjunto con la Policía de Santa Fe y fuerzas federales.
Los operativos de control vehicular se realizan de manera regular en distintos puntos de la ciudad, con el objetivo de disuadir a los conductores de tomar alcohol antes de manejar.
Además de los controles de alcoholemia, se realizan otros tipos de fiscalizaciones, como la verificación de la documentación del vehículo y el estado de los mismos.
En lo que va del año, se controlaron más de 87 mil vehículos y se remitieron al depósito municipal más de 8.900 por diversas infracciones.
“La combinación de un trabajo sostenido, campañas de concientización y leyes más rigurosas ha generado un cambio de actitud en los rosarinos”, destacó Herrera. “Cada vez más personas son conscientes de los riesgos de conducir bajo los efectos del alcohol y optan por tomar decisiones responsables”.
Los datos obtenidos a partir de los controles de alcoholemia son elocuentes
Incremento de los controles: La cantidad de controles de alcoholemia se ha multiplicado en los últimos años, lo que demuestra un mayor compromiso de las autoridades con la seguridad vial.
Reducción del índice de positividad: La disminución del porcentaje de conductores alcoholizados es una señal clara de que las medidas preventivas están dando resultados.
Mayor conciencia ciudadana: La sociedad rosarina ha mostrado una mayor conciencia sobre los riesgos de conducir bajo los efectos del alcohol, lo que se refleja en una reducción del consumo de alcohol al volante.
La experiencia de Rosario demuestra que es posible reducir significativamente los casos de conductores alcoholizados a través de un trabajo coordinado entre las autoridades y la sociedad. La combinación de controles más frecuentes, campañas de concientización y leyes más rigurosas ha generado un cambio de cultura vial en la ciudad
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