Autoridades sanitarias del gobierno de la provincia de Santa Fe y de la Municipalidad de Rosario dieron a conocer la situación epidemiológica de la enfermedad transmitida. Destacaron que en la ciudad ya se llevan registrados 2.497 casos de dengue y 87 de chikungunya desde el inicio de 2023.
Tanto Sebastián Torres, subsecretario de Promoción de la Salud de la provincia, como Matías Lahitte, director de Epidemiologia del municipio, destacaron que para evitar el dengue y el chikungunya es fundamental el descacharrado, el uso de repelente y la limpieza de reservorios de agua, acciones efectivas para eliminar las larvas y el mosquito aedes aegypti, transmisor de ambas enfermedades.
“Observamos un aumento en las consultas en los centros de salud por casos febriles, pero los testeos sobre dengue van disminuyendo. Esto va de la mano con las tareas de prevención que se están realizando. Es fundamental estar atentos a los signos de alarma como fiebre, dolor abdominal, vómitos persistentes o presencia de hemorragias, ante estos síntomas es fundamental concurrir al médico. Ante bajas temperaturas la población del mosquito en fase aerea puede disminuir, pero es importante realizar tareas de prevención sobre los criaderos durante todo el año”, destacó Matías Lahitte.
Por su parte, Sebastián Torres confirmó que en la provincia de Santa Fe son 13.647 casos de dengue y 110 casos de chikungunya y dijo que “la realidad es que la efectividad de la prevención es trabajar sobre el reservorio donde se puede acumular agua, como por ejemplo las tapitas, baldes, etc. Si se trabaja sobre el reservorio donde se acumula agua van a disminuir drásticamente los casos de dengue. Por eso es importante el trabajo que cada uno realice en su domicilio”.
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